Fantasía

Viajo en mi barca

entre islas sin nombres,

marchitos mis sueños,

mis besos marchitos.

Con la brisa inquieta

se mueven las hojas

dialogo en silencio

con cada recuerdo.

Paseo en mi barca

por orillas desiertas,

marchita la vida

marchito el recuerdo.

Paseo colgada del sonido del viento.

Divago soñando, en mi mundo desierto

© Olga M. Muñoz

Ivonne Sanchez Barea

“DESTIERRO  Y FINALMENTE PAZ”

En esa primavera el pequeño jardín se llenó de Purpuras Iris.

El regalo del cielo, con ansiedad esperado…¡al fin llegó!

Un montoncito tierno de carne sonrosada parecido a una flor,

Y para orgullo mío…alguien por la calle “Rosa” la llamó.

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Fue en esa primavera… ¡la última!...recuerdo,

Que disfruté…con “Paz”

Una nube temible de injusticias…y abusos…

Sin darnos ningún tiempo…del “Monte”…descendió.

---0---

Y…Aquélla “Paz…Beatica”…a la que tanto yo amaba…

Casi sin darnos cuenta …sigilosa, traidora y violenta…la nube aniquiló,

Dejándonos el alma…sola, triste y vencida…¡llena de dolor!

Y para remediarlo…levantamos el vuelo…y sin mirar atrás y sin decir “Adiós”.

---0---

?Qué la Paz necesito para abonar mi tierra y sembrar la semilla?

¡Qué la Paz, me es vital al recoger la cosecha que yo…sembré…con tesón!

¡Qué es con Paz y dulzura que lograremos de este mundo hacer…un lugar mejor!

Donde la siembra sea Buena y la Buena semilla se logre con “Amor”

~ María Josefa San Juan Estupiῆán de Novas

 

MUJER

Angeles Carretero Casar

Vivimos en un mundo donde La Mujer está relegada, en algunos países y en algunas situaciones, a un segundo plano y es a ella, la Mujer, a quién dedico este canto de gratitud y reconocimiento.

Mujer, Madre que ama a su hijo que ha nacido.

Mujer, Madre que llora a su hijo que ha perdido.

Mujer, madre, hija, hermana, esposa, amante y amiga que

Antepone su vida por los seres que ama y que la necesitan.

Hijo, hermano, esposo, amante, abuelo y padre,

Cada uno con vidas diferentes, vidas que viven o que han vivido,

Todos ellos han nacido de la Mujer-Madre,

Y, han recibido todo su cariño, cuidado y mimo.

Mujer, cuyos ideales, sueños y anhelos, a veces

Los has dejado en la ribera del río o en la cuneta del camino,

Son sueños del alma que te han sido sesgados, por la

Ignorancia de unos seres y por la voracidad del mundo.

Sueños que revolotean como aves sin un lugar donde posarse,

Porque ese lugar ha desaparecido.

Mujer protectora de vidas y Mujer luchadora

Más por obligación que por devoción,

Has creado a la Mujer guerrera cuya fuerza

Y coraje la alimentan, en ésta lucha que es Su vida,

Para atravesar el océano de la muerte, y tal vez,

Renacer en una tierra prometida.

Mujer guerrera que combate por amor,

Sin rendirse en esa batalla de tradiciones y costumbres

Que como en una batalla naval donde el barco naufraga, y

Cuando no hay fuerza y el coraje se ha ido,

La nombran capitana de las huestes de su vida

Llevando a buen puerto a su vástagos y familia.

Mujer amante y esposa cuyo amor hace que la vida

A su lado sea fructífera y hermosa, llena de perfumes

Y de especias para satisfacer los gustos

De sus diferentes amores.

Mujer, Mujer, Mujer…

A lo largo de los años de la Historia,

Cuántas alabanzas, alegrías y amores

EL lienzo ha plasmado y el poeta ha cantado,

Y, cuántos desaires, abusos y violencia…

La palabra ha dicho y el gesto ha hecho por desprecio y rabia.

Mujer eres madre, hija, amante, esposa y amiga.

Mujer eres vida y alegría que con tu fuerza y voluntad

En esta tragicomedia de la existencia,

Caminas erguida, mirando de frente, aunque, a veces,

Cubierta de dolor y sombra en cuya tiranía te hacen caer,

Pero, tu fuerza y voluntad harán que te alces sobre las

Cosas más bellas del mundo, creando a la

Mujer Sabia, a la Mujer Filósofa, a la Madre Divina

Guardiana de la doctrina sagrada

Y de los misterios de la creación humana.

Con una gaviota

Deambulaba mi alma

por gélidos parajes,

cuando de pronto! Una gaviota

Aparece en mi camino

 

Con sonrisa entristecida

la seguí con la mirada;

ella, moviendo sus alas

quiso acompañar mi destino.

(Herida como yo,

iba la gaviota con su suerte

cruzando el Horizonte.)

Sus ojos y mis ojos se miraron,

sus alas a mis manos acariciaron.

 

Entendióse el ave mi sentir,

Se juntó conmigo y…

¡ volé con ella!

Alma y alas, abrazadas,

continuamos nuestro viaje,

Allende el pálido horizonte

¡Allende!Por gélidos parajes !

© Omm Olga M. Muñoz

y…

Y me refugié en tu sombra

y me refugié en tu olvido

y para recordarte muchas flores corté

¡flores marchitas!

y te soñaba, que eras

cuando en realidad no estabas!

Imaginando momentos

reviviendo cada aurora.

Y me refugié en tu espacio

y me abrigué con tu acento

y cortaba rosas frescas

que pronto se marchitaban.

y soñaba que aquí estabas

cuando en realidad no eras!

Y me refugié en tu risa

en tu abrazo inesperado…

y hasta la sombra del viento

refugióme en mis pesares.

Y… me refugio en tu sueño;

en un hoy! ¡Mústio y callado!

© Omm Olga M. Moñoz

Auto Sacramental Campesino de la Virgen de la Caridad del Cobre, a los 400 años de ser hallada su imagen flotando en la Bahia de Nipe (Lectura Dramatizada en 11 Actos) 

Por Antonio J. Molina

Fundación Cuidad de Sancti Spíritus, Puerto Rico 2017

Algunos Datos Históricos que Aparecen en el Famoso Archivo de Indias de Sevilla

Por Antonio J. Molina

Miembro de la Real Maestranza de Caballeria de la Habana (Fundada hace más de 200 años en Cuba) Director de Cuadernos de Historia, San Juan, Puerto Rico 2017

Elegía para la Dama de las Rosas

María San Juan De Novas

El papelito en la mesa

Me cautivó  la atención,

Y sin pensarlo dos veces,

mi mano lo recogió.

 

Al leer dicho papel,

Comprendí lo que querías.

Me estabas dando permiso

Para escribir “POESIA”.

 

Yo quise hacer un poema,

buscando en mi corazón

su imagen de madre hermosa

comparándola a la rosa.

 

Era linda distinguida,

toda llena de dulzura

Y sin dudas poseía

la elegancia de una rosa.

 

Ella sembró mil rosales,

que yo siempre protegí

y así después de tres décadas

ella sigue viva allí.

NO LO SABES

Pilar González Navarro

Si tú supieras...
si fueras consciente de la fragilidad
y transparencia del cristal
de mi corazón, no lo romperías tanto.

Si tú supieras…
que con las lágrimas
que me has hecho derramar,
podrían llenarse pantanos.

Si tú supieras...
el estruendo que al caer al suelo,
ha hecho mi amor de cristal,
no dudarías tanto.

Si tú supieras...
la blancura que no sólo
recubre mi piel,
sino también mi alma,
no la pintarías
de un color distinto
cada semana.

Si tú supieras...
que el amor no se mide
por meses ni por años.

Si tú supieras...
que puede ser inmenso
y leal en tan sólo
unos instantes y tras esos
instantes primeros,
el más sublime y certero
que jamás te hayan dado.

Si tú supieras...
lo que sabe mi almohada
cuando sobre
ella me reclino llorando,
si te dijera cuántas veces
grito tu nombre,
en tantas amargas noches,
donde estás ausente
y no entiendo porqué lo haces.

Si tú supieras...
el vacío que me invade al perder
mis ilusiones, mis retos,
mi vitalidad y hasta jirones de piel
que se deshacen
porque no quieres tocarme.

Si tú supieras...
todo esto amor, no harías
lo que haces.
Pero es que no lo sabes.
¡No! No lo sabes.

Es imposible en ti, saberlo
y hacerlo, siendo
la persona que eras antes.

Si tú supieras...
la de veces que miro al cielo,
buscando a tu dios
o a un ángel para pedirles
que te ayuden
a saber lo que no sabes,
para que te enseñen
a no romper más cristales
que sin querer tiras
al suelo, ignorando lo que valen.

Pero no, no lo sabes…
Cuando lo sepas quizás ya no esté.
Por ahora sigo barriendo
los trocitos que tú, sin saberlo rompes.

Cuando me fallen las fuerzas,
y mis ojos vean claro
que me recoja alguien si caigo,
que está el suelo muy
frío y sola, no podré levantarme.


Febrero 2018